Despedaza Ebrard el “abrazos, no balazos”

Adrián Rueda / EXCELSIOR

Al anunciar su Plan Ángel, con el que promete bajar los índices delictivos en caso de ser presidente, Marcelo Ebrard hizo pedazos el abrazos, no balazos de Andrés Manuel López Obrador, pues reconoció que los mexicanos no se sienten seguros en las calles del país.
A diez días de que López Obrador celebrara en el Zócalo el quinto aniversario de su triunfo, y que en la plaza pública afirmara que su estrategia ha dado resultados, con lo que México es un país muy seguro, Ebrard expresó lo contrario.
No solamente porque el excanciller no habló de incluir ni los abrazos ni el acusar a los delincuentes con sus mamás o sus abuelos, sino de aplicar tecnologías, como la inteligencia artificial.
Además, en entrevista con Joaquín López-Dóriga, aceptó que los mexicanos no se sienten seguros en ningún lado y que así se lo han hecho saber en sus giras. Le han dicho que México es hermoso y que es muy triste no poder recorrerlo por temor a ser lastimados.
El excanciller dijo también que, a pesar de que en Morena les prohibieron hacer propuestas y debatir entre corcholatas, él decidió no respetar eso, pues los aspirantes de la 4T son completamente aburridos si se dedican a repetir su cantaleta en todos lados.
Por eso propone utilizar la inteligencia artificial y que la Guardia Nacional aplique los sistemas de investigación más avanzados que se usan en el mundo. Claro que omitió decir que en los países democráticos los cuerpos policiales son civiles, en las dictaduras son militares.
Se sabía que Ebrard no comulgaba con todas las políticas de la 4T en materia económica y de salud, por ejemplo, pero había cerrado la boca… hasta ahora que es aspirante.
Al soltarse el pelo, el excanciller toma el espacio que en un tiempo ocupó Ricardo Monreal, marcando durante meses distancia con Palacio Nacional, acercándose a los sectores moderados de la sociedad.
Sólo que en las últimas semanas el senador volvió a ser tapete, mientras que Marcelo empezó a marcar el ritmo en la 4T al obligar —primero— a que las corcholatas renunciaran a sus cargos y, ahora, al irse por la libre con propuestas de gobierno.
Con ese discurso se apodera, junto con Xóchitl Gálvez, de los reflectores y cada vez va creciendo la idea de que sólo hay de dos sopas en 2024: la senadora por el frente opositor y Ebrard por Morena o… El resto de las corcholatas solamente existe en la cabeza de la 4T.
Por cierto, la palabra ángel parece fascinarle a Marcelo, pues, antes de su plan de seguridad, en 2010 creo la Red Ángel, con 450 programas sociales que conformaron el sistema de protección social más grande de Latinoamérica.
Marcelo despedazó las políticas más importantes de la 4T y, si no es Presidente, igual podría alquilarse como secretario de Seguridad.

CENTAVITOS

Mientras el Presidente no atina a destapar a los candidatos de su propio partido, sí se siente apto de hacerlo con los de oposición. Primero destapó a Xóchitl Gálvez, cuando ya estaba más que destapada. Hoy repite con Santiago Taboada para la Jefatura de Gobierno, cuando el alcalde se destapa todos los días. ¿Qué gana López Obrador haciéndole al adivino en la oposición y guardando silencio sobre los suyos? Que la gente no mire hacia las masacres, la economía y la corrupción… Por cierto, junto a Taboada, ayer salió a enfrentar al tabasqueño el diputado Luis Mendoza, aspirante a alcalde en Benito Juárez, quien dijo que el Presidente los ataca porque sabe que desde ahí se fincará la derrota de Morena en 2024.