Por Octavio Camelo Romero
La soberanía energética está fundamentada sobre los hombros de PEMEX y de CFE, dos empresas que los gobiernos neoliberales del PRI-PAN, desde Miguel de la Madrid hasta Enrique Peña Nieto, quisieron entregarlas al capitalismo transnacional, sobre todo de Estados Unidos, Canadá y España.
En relación con PEMEX dijeron que se había acabado la gallina de los huevos de oro para justificar su desmantelamiento y venta a empresas de capital transnacional, con lo cual, la camarilla neoliberal que tenía secuestrado al Estado Mexicano, obtuvo ganancias equivalentes a varios miles de mil-millones de dólares.
Pero resulta que, con la llegada de André Manuel López Obrador a la Presidencia de la República Mexicana, PEMEX no sólo dejo de ser su caída de la producción petrolera, sino que esa tendencia negativa la convierte en una tendencia positiva y, en terrenos que los neoliberales quisieron vender a extranjeros pero que no lo lograron hacer, se descubrió un campo petrolero de varios pozos con una productividad y producción mucho muy superior a la de los pozos de aguas profundas.
El último pozo de petróleo encontrado al igual que los otros, se localiza en el Estado de Tabasco y puede romper los récores alcanzados por los otros yacimientos. El Presidente López Obrador estará en la entidad el 18 de marzo para inaugurarlo y evaluarlo. Se estima que tendrá una producción de 600 millones de barriles de petróleo crudos, el pozo con la mayor producción petrolera, que además se encuentra cerca de la refinería de Dos Bocas. Pero, además, el costo de extracción por barril de estos yacimientos, será mucho más barato que el costo de extracción de los pozos en aguas profundas.
No se ha secado la gallina de los huevos de oro, como decía Peña Nieto. En su afán de entregar los recursos nacionales pertenecientes al Pueblo de México, y con ello amasar grandes fortunas mal habidas, como pago por su traición a la Patria, los corruptos prianistas filtraban información de las riquezas naturales y se negaban a explorar el subsuelo nacional.
Estos venden patrias son los que están en contra de la Cuarta Transformación, 4T, y son los que a cada rato están “calentando la plaza” con el vandalismo de las manifestaciones pacíficas, con el amarillismo de los medios de comunicación, en especial de las televisoras, y con los ataques de los intelectuales orgánicos.
Ya se están dando los pasos firmes para rescatar a PEMEX, que la habían empujado hacia atrás, durante más de 30 años, desde Salinas de Gortari, pasando por Felipe Calderón y hasta Enrique Peña Nieto. Ya se percibe una ganancia en las ventas de la empresa, y el costo de barril de petróleo pasó de 14 dólares por barril en 2019 a 11 dólares en 2020. Cada año sube la productividad y baja consecuentemente el costo de producción, con lo cual el margen de ganancia aumenta. En 2020 se terminó la caída de la empresa e inicia su recuperación. Los antipatrióticos del PRI-PAN no lograron acabar a PEMEX. En fin.
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