Por: Lic. Roberto Guardado Jiménez
Una hospitalaria población de habitantes, ejidatarios, pescadores, ostioneros, fruticultores, agricultores, comerciantes, todos, 777 mujeres y 792 hombres de acuerdo al INEGI 2020 trabajan, conviven y han convertido este hermoso rincón del Pacífico Mexicano en un paraíso que conserva su belleza natural para el turismo nacional e internacional. El crecimiento de su población es bajo. En 2010-2020 se registró un 11.75%
Ubicado en el municipio de San Blas Nayarit, México, al extremo sur de la Bahía de Matanchén, coordenadas 21°28’59.0″ Norte 105°11’58.6″ Oeste es una excelente opción para el ECOTURISMO, incluyendo gastronomía, deportes acuáticos, campismo, ciclismo, observación de selva y aves tropicales, montañismo, un arroyo, hay muchas opciones.
Cuenta con hoteles de costo moderado con todas las comodidades. Aire acondicionado, televisión satelital, Internet, buenas instalaciones, alberca, excelente servicio y atención.
Los restaurantes y ramadas tienen la mejor calidad de pescados y mariscos frescos con precios relativamente bajos. Existen también los que ofrecen desayunos y antojitos mexicanos, siempre proporcionando un trato amable y atento
Los ostiones de piedra frescos son el atractivo principal, tambien el pescado sarandeado y todo tipo de platillos basados en la cocina tradicional mexicana de mar y tierra. Sobresalen los típicos Balazos, cocteles a base ostión y camarón.
Es accesible por medio de cuatro vías de comunicación terrestre: Mazatlán-San Blas-Aticama, costeando la Bahía de Matanchén, Guadalajara-Tepic-Aticama por autopista, Puerto Vallarta-Las Varas-Aticama por la carretera costera y la ruta Tepic-Jalcocotán-Aticama.
La temporada de lluvias es ligeramente calurosa, la seca parcialmente nublada y es muy agradable durante todo el año. La temperatura generalmente varía de 16°C a 33°C y rara vez baja a menos de 12°C o sube a más de 34 °C.
La temporada calurosa dura aproximadamente cinco meses, de mayo a noviembre, y la temperatura máxima promedio diaria es de 32°C. La época fresca dura alrededor de tres meses, de diciembre a marzo. La temperatura máxima promedio diaria es menos de 29º C. La temperatura mínima promedio este año fue de 16ºC y máxima promedio de 28°C.
La parte más despejada del año comienza aproximadamente en octubre; dura aproximadamente 8 meses. La más nublada del año comienza en junio; dura 4 meses
La temporada más mojada dura 4 meses, desde junio. La más seca seca dura 8 meses, desde octubre. La temporada de lluvia dura 9 meses, de mayo a febrero. El periodo sin lluvia dura 3 meses, de febrero a mayo.
Durante el año, el sol proporciona diferentes paisajes en el atardecer. Gracias a su ubicación frente al mar pueden disfrutarse en la placita o desde las típicas ramadas del Paseo del Ostionero. El día más corto es en diciembre, el más largo en junio. La humedad alta registra un periodo de 8 meses de abril a diciembre,
La brisa del mar y el viento proporcionan frescura y un clima agradable. La época con mayor intensidad ventosa dura 5 meses aproximadamente, de enero a junio, con velocidades promedio de más de 9.2 kilómetros por hora.
El tiempo más calmado dura 7 meses, de junio a enero, con una velocidad promedio del viento de 8.2 kilómetros por hora.
El viento viene del oeste durante 9 meses, a partir de enero. Durante otros meses proviene del norte y el este.
Eventualmente azotan los huracanes, como Kena en 2002 y Nora en agosto 2021.
La temperatura del agua más alta dura de abril a noviembre. El agua de la bahia de Matanchén se conserva templada durante el resto del año debido a su baja profundidad
La elevación del punto central de las coordenadas sobre el nivel del mar es de 13 m. La topografía en un radio de 3 kilómetros tiene variaciones muy grandes de altitud, con un máximo de 250 metros y una altitud promedio sobre el nivel del mar de 26 metros. En un radio de 16 kilómetros contiene variaciones muy grandes de altitud (1,273 metros).
El área en un radio de 3 kilómetros de Aticama está cubierta de agua (55 %), tierra de cultivo (25 %) y áboles (21 %). La diversidad de ambientes ecológicos propicia la presencia de peces, mariscos, aves, reptiles, insectos, mamíferos salvajes, otros tipos de fauna silvestre y gran diversidad de flora tropical.
La mejor época para visitar Aticama es prácticamente todo el año para y los ambientes que proporciona la naturaleza en las diferentes estaciones y entornos ecológicos. En verano y otoño, la naturaleza resplandece en tonalidades de verde y en invierno arriban las aves migratorias procedentes del norte. Primavera es la estación de la floración silvestre y de huertas.
Las posibilidades para desarrollar turismo ecológico de bajo costo son ilimitadas. En la zona de marismas y esteros cercana a San Blas y la Bahií de Matanchén habitan cocodrilos. Definitivamente es un destino obligado para los amantes de la naturaleza.
Fuentes: Principalmente weatherspark.com, con información de estaciones meteorológicas cercanas, satélites, FAO-ONU, NASA NOAA, National Geographic y otras instituciones. También INEGI, weather.com, Google Maps, Wikipedia, turimexico.com, playasdemexico.com.mx
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